En pleno
nacimiento de la revolución rusa –por cierto, una historia fundamental que todo
revolucionario debe conocer- los
revolucionarios rusos pidieron ayuda a muchos países del mundo. En aquel
momento, la claridad política de Lenín y su visión estratégica, le daban como
conclusión la imperiosa necesidad de la creación de un periódico. Es así como
Iskra (La chispa) estaba montada en un
tren en forma de rotativa. Se imprimía de ciudad en ciudad. Así, el pueblo se
enteraba de los primeros pasos de la revolución rusa que en sus inicios por
cierto, era bien adeca, para decirlo en términos criollos. La primera donación
la recibió para hacer el periódico, la recibieron de manos de los Estados
Unidos: un millón de dólares.
Quizás el
más brillante –por lo preciso- de todos los teóricos políticos, Lenín, entendía
la alianza con el enemigo para derrotar a otro enemigo, aunque en este caso
fuera recibir una donación del imperio. El Tío Miguel siempre tomaba a Lenín
para ejemplificar los movimientos que debían hacerse en política. A pesar de
ser un hombre radical, tenía mucho criterio sobre las acciones que debían
tomarse en la acción política. Hugo ha demostrado ser un maestro en los
movimientos políticos. Incluso cuando uno siente que se equivocó, a la larga
demuestra que tiene razón en torno a decisiones con las que uno está en
desacuerdo. Lo cual no quiere decir que no se haya equivocado… y mucho.
Simplemente
con ello se evidencia que en política no siempre dos y dos son cuatro. Y que a
veces, aunque las jugadas no se entiendan, al final se está persiguiendo un
objetivo de mucha más importancia.
No hace
falta ser un analista para saber que hemos acumulado reveses en el tiempo que
van a pesar mucho cuando haya elecciones. Demasiadas torpezas, demasiada
incompetencia, demasiada corrupción, una gestión pública cada vez más patética,
generan un malestar en el ciudadano que lo cobrará, sin ninguna duda en los
próximos comicios. Hay números concretos que así lo evidencian, números
nuestros por cierto, no de la oposición, como el hecho de que perderíamos 11
gobernaciones y probablemente 236 alcaldías. Eso es un hecho. Y que quede claro
que no estoy hablando de las presidenciales. Hay incluso coincidencia en los políticos
serios de la derecha, en torno a que si es Hugo el candidato, no hay nada que
buscar: nadie le gana. Pero también creen que si logran cierta unidad, podrían
apropiarse de la mitad de gobernaciones y alcaldías; y en consecuencia de una
parte importantísima de la burocracia del Estado.
Es decir,
que tendríamos un gobierno con Hugo Chávez como Presidente, pero con un gravísimo revés
en la administración pública. A lo que debemos sumar que ministerios y empresas
del Estado, de hecho son manejados por la derecha endógena, o los enemigos
solapados que no más ver a Hugo en Cuba y creer que no regresaría, comenzaron a
negociar con la derecha. Hay bastantes datos sobre eso, los que estaban
planeando cómo abandonar el barco. O sea, las ratas de costumbres.
Al menos
quienes creemos que este proceso debe existir por siempre, a pesar de lo crítico
que somos, tal situación nos angustia, pues creemos que es menester
redimensionar todo, revolver todo, alterar todo, dar auténticos pasos
revolucionarios y transformar antes de que sea tarde.
En el caso
de Carabobo, todos los números que he visto, nos anticipan una derrota
aplastante no solo en la gobernación, sino también en las alcaldías de
Valencia, Carlos Arvelo, Los Guayos, Mariara, Bejuma y Miranda, además de las
ya perdidas San Diego y Naguanagua. Y el hecho concreto es que el Buro Regional
lo sabe, y nuestra propia militancia lo olfatea. Pero lo cierto es que Carabobo
es un estado fundamental para la acción política en la construcción de la
revolución.
Y aquí
vuelvo al principio. Si el enemigo de mi enemigo, es amigo, entonces debo
hurgar en algún lado, en busca de aliados para derrotar a nuestro principal
enemigo: Henrique Salas Römer. Con nombre y apellido por realmente es el único
que tiene cabeza política y que además tiene control total sobre la región. Y
lo más patético de esta realidad es que su hijo el gobernador ha hecho quizás
la peor de todas las gestiones. Con decir que no ha hecho nada es suficiente.
Pero de manera impresionante, “El Pollo” –que ahora llamaremos El Innombrable
0- tiene más de 60% de la intención del voto, incluyendo los 100 mil que
perdimos en Miguel Peña el 26 de septiembre pasado. Patético. Cómo la
incompetencia de nuestros alcaldes y dirigentes, redundan en beneficio del
enemigo de una manera tan precisa.
En lo
personal creo que si queremos contribuir con Hugo en la construcción de este
proceso, es menester la reconquista del poder. Y éste no es posible con los
mismos alcaldes como candidatos y los mismos dirigentes haciendo todo mal. Es
menester diseñar una estrategia. Buscar una fórmula. Y ella, a mi juicio, pasa
por la consideración del viejo dicho “el enemigo de mi enemigo, es mi
amigo”. De lo contrario, Carabobo será
un nicho de los Salas, entorpecedor del proceso, bastión de la derecha y una
limitante de peso para hacer la revolución.
Caminito de hormigas…
Pregunta: ¿qué
abogadito hijo de un “dirigente” del Psuv, fue nombrado juez de alto calibre y
que luego fue destituido porque se descubrió que tenía antecedentes
penales?... Aún cuando la “MUS” como
la bautizara Chávez, hace presión para que el salismo se someta a las
primarias, el viejo Salas se niega aceptando. No es un contrasentido. Está
haciendo movimiento para salir ganador en caso de Henrique Fernando deba ir a
los comicios de febrero… Por cierto, me dicen que parte de
los movimientos que hace Salas en Caracas, es la negociación para que le quiten
a Enzo Scarano de encima, además de su aspiración a ser gobernador. Aunque me
dicen que el italiano podría ser alcalde de Valencia. ¿Cómo la ven?... Un alto dirigente del chavismo,
confesó en una reunión chiquita, que si lo presionan mucho, no tiene otra
salida que saltar la talanquera. Para ello, se sabe de un emisario que envió a
los brazos de Salas con quien mantiene conversaciones… El tema de las arepas
socialistas a Bs. 7.50 según nuestro ministro y la mentira que le tiene
asestada a Hugo, es pura coba. En la arepera socialista de Carabobo, ubicada en
el retorno de La Encrucijada de Carabobo, las arepas cuestan Bs.10 y Bs.12.
Vayan y lo comprueban.
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